En la fotografía antigua de hoy podemos ver la imagen de
"El Señor Atado a la Columna", realizado por Gregorio Fernández
hacia 1619 por encargo de la Cofradía Penitencial de la
Santa Vera Cruz.
Esta talla es la imagen titular de la Hermandad Penitencial de
Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna, fundada en 1930 por
el entonces Arzobispo Remigio Gandásegui que conocía el interés
devocional de los congregantes de San Estanislao de Kostka y de
San Luis Gonzaga y les encomendó el alumbramiento de los pasos de
"La Flagelación del Señor", "Nuestro Padre Jesús Atado a la Columna"
y "Camino del Calvario".
Esta sección disciplinante desfilaba con insignias y distintivos
propios de la Congregación Mariana, hasta que en 1942 adoptaron
el hábito actual, que se compone de capa y túnica blancas con
bocamangas de encaje y capirote y cíngulo azul celeste.
Sobre esta imagen todavía se sostiene una leyenda que no se sabe
si es cierta o no, pero que Juan Agapito y Revilla definía como
"vulgar", es decir reconocida y muy citada entre los vallisoletanos
del siglo XVII.
Había concluido Gregorio Fernández de trabajar en el "Cristo Atado
a la Columna": "horas y horas enteras pasa en idéntica postura ante
su obra, sin mover para nada el cuerpo; se duda en contestar si
Fernández ó el Cristo es la estatua […] una voz dulce se oye en el
recinto y pregunta a Fernández: "¿dónde me miraste que tan bien me
retrataste?". El escultor, con espontaneidad, sin impresionarse por
tamaño prodigio, consultando su fe y su conciencia le contestó con
humidad: "Señor, en mi corazón".
Esta fotografia pertenece a una colección de cromos sobre la
Semana Santa vallisoletana que existió hacia el año 1945.
Gracias a Mauro Urdiales.
(Para ver la foto mas grande, pinchad sobre ella)
e-mail de contacto: blogsemanasantavad@hotmail.com
5 comentarios:
Resulta curioso observar al Atado con las potencias.
Personalmente, le prefiero sin ellas.
Un saludo.
La verdad es que le quedan fatal las potencias, este Cristo no necesita ningun adorno, es bellísimo.
He estado viendole en la exposición de las Francesas y verle de cerca es una sensación dificil de explicar...
La historia es tan bella como la imagen, y ambas, impresionantes.
Un abrazo.
Al Atado no, pero a otros Cristos, sí les quedan bien las potencias, hacen que su rostro resalte. Es sólo mi opinión...
Un saludo.
Yo soy de los que piensan que cuando una talla de Cristo o de una Virgen se dice que está mejor con potencias, coronas, etc es que la talla en sí no es todo lo buena que se dice.
Las genialidades como esta no necesita ningún adimento para ser excepcionales.
Me encanta Marcos cada vez que pones las fotos de esta colección de cromos.
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